Es tiempo de despedir un 2022, un año no exento de cambios, en primera instancia, la pandemia se ha terminado desde el punto de vista de las restricciones a las cuales nos habíamos acostumbrado. Y con ello una explosión de exposiciones y juntas se han desarrollado durante este 2022, volviendo a realizarse algunas insignes como Talagante, y otras tomando fuerza insospechada como Los Andes y Los Queñes.
Este recóndito y perdido blog ha cumplido 13 años, en un mundo desechable en donde después de echar un vistazo y entregar un “like”, suele todo pasar al pasado, este humilde reducto se mantiene como un testimonio fiel a través del tiempo, en el cual siempre se puede visitar, encontrando todas las fotos, recuerdos y crónicas a desde su creación. Hoy celebramos las 212.000 visitas, para un blog que no consta de mayor publicidad o difusión creo que es todo un mérito. De lo anterior solo puedo agradecer encarecidamente a todos aquellos que nos visitan, en especial a aquellos que vuelven a cada semana o día a revisar cada post.
Como parte de este resumen, Mi motoneta reposa a la espera de armado de su motor, mi kombi t2 crew cab, ha vuelto a pasar por cirugía y con ello su corazón vuelve a latir más fuerte que nunca. Mi kombi split me ha llevado a disfrutar de la mayoría de los eventos a los cuales asistí durante este año y con ello me he vuelto a encantar con esta pasión tuerca.
Así como un largo viaje, este nuevo año ha sido la ocasión para dejar algunos amigos seguir su propio camino, mantener el viaje junto a muchos de ellos, y como es de esperar cultivar nuevos amigos.
Y como todo resumen, los invito a dar una última hojeada a los post más relevantes de este 2022…